Conocedor de historias sin escape,
se ve venir...
Como la luchadora noche del lunes
a la burlona madrugada del martes,
que sabe cierta su llegada.
La canción que es valiente
no tiene brillo, sino luz,
y en alguna soledad se fuga el neón
por el peso de otro dolor.
Porque mutante cruzó de vereda sin mirar
y se dejó atropellar sin querer, queriendo.
Porque el tambor rojo salió de su caja
pero no sonó música, sino lamentos.
Ya no tiñe de negro la idea de ver,
ni parecer, y solo quiere estar y ser.
Y habiendo sacado pasaje,
tiene que volver.
Historias rejuntadas así como sin querer en la calle, un café, o un bondi, de una forma que nunca intenta ser poesía, porque la vida no lo es. O si, según se mire con los ojos cerrados. No todo es autorreferencial, pero todo es mio, nuestro y tuyo si así se siente...
9.9.08
3.9.08
Imposible evitar el karma
ni la ley de gravedad,
de bajar cuando estás arriba,
receta contra la felicidad.
Alguien no hace pie
sin importar la altura ni la profundidad.
Tambalea el rombo imperfecto,
gira el trompo sin cesar
y abarrota la azotea de incertidumbre.
La trampa se vuelve a cerrar en la cola del ratón.
Porque aunque el queso sea delicioso
no contempla la cáscara,
porque duele entre tanto algodón
cualquier espina,
y más aún en un mapa de cicatrices.
Boomp3.com
ni la ley de gravedad,
de bajar cuando estás arriba,
receta contra la felicidad.
Alguien no hace pie
sin importar la altura ni la profundidad.
Tambalea el rombo imperfecto,
gira el trompo sin cesar
y abarrota la azotea de incertidumbre.
La trampa se vuelve a cerrar en la cola del ratón.
Porque aunque el queso sea delicioso
no contempla la cáscara,
porque duele entre tanto algodón
cualquier espina,
y más aún en un mapa de cicatrices.
Boomp3.com
Suscribirse a:
Entradas (Atom)